Consejos para pasarlo bien en una playa nudista

Hace un tiempo recordaréis que publicamos un artículo sobre cosas que no debíamos hacer en una playa nudista. Si lo tuvisteis en cuenta seguro que os habéis ahorrado malas situaciones en las que ninguno nos queremos ver envueltos. O es posible que aún no os hayáis atrevido a ir a una de estas playas. Por si acaso, hoy os daremos consejos que os permitirán pasarlo bien en este lugar que cada vez es más frecuentado por todo tipo de personas.

Lo primero de todo y fundamental es que entremos en la playa nudista olvidándonos de los complejos. Si somos personas que sienten vergüenza por enseñar su cuerpo es mejor que optemos por una playa tradicional y que llevemos el bañador. En este tipo de playas la gente va a su aire y no se dedica a mirar el cuerpo de los demás. Pero siempre puede haber miradas. Lo mejor es que te libres de los complejos y que vayas a tu aire, tranquilamente y sabiendo bien que estás desnudo, pero que lo estás en un lugar abierto a ello.

Por otro lado, no te olvides la crema contra el sol. Esto es algo que os recomendamos siempre que hablamos de la playa y que alcanza una mayor relevancia si vamos a una nudista. No tendremos nada, absolutamente nada, que nos proteja del sol. Así que pongámonos mucha crema protectora.

Lo que sí puedes llevar es una gorra o unas gafas de sol. Pensemos en el nudismo como una elección, pero no como una radical que lleva a no utilizar accesorios que nos pueden beneficiar. Si nuestros ojos son sensibles al sol y sabemos que unas gafas de sol resultan imprescindibles para nosotros, no pensemos que por ser una playa nudista no podemos usarlas. Lo mismo podemos decir de la gorra o de cualquier otro accesorio que os resulte necesario para las horas que paséis en la playa.

También os recomendamos ir en pareja o incluso en familia, dado que si alguien lo pasa mal seguro que será más fácil que se quede tranquilo. Y, sobre todo, actuar con naturalidad. Si elegimos una playa nudista lo debemos hacer porque sepamos que nos va a proporcionar una ventaja y la oportunidad de estar más a gusto con nosotros mismos durante el tiempo que estemos en ella. Relajarnos y pasarlo bien es fundamental para que tengamos ganas de repetir en el futuro, algo que posiblemente hagamos.